NOS COMUNICAMOS POR ESCRITO PARA TRANSMITIR MENSAJES, CREAR REFERENCIAS Y LOGRAR QUE NUESTRA INVENTIVA ORDENE, CONDICIONE, INFLUYA, IMPACTE Y PERDURE
Los contenidos escritos están en todas partes
Conllevan la elaboración de un contenido las creaciones que son fruto de la imaginación, la inventiva, el estudio o el conocimiento, ya se trate de iniciativas estrictamente personales o de proyectos promovidos por empresas dedicadas a rentabilizar el talento y el esfuerzo técnico y creativo de los demás.
Así, los guiones preceden a las películas, documentales, programas audiovisuales, vídeos corporativos o promocionales, tiras cómicas, ilustraciones gráficas…, mientras que novelas, estudios técnicos, trabajos documentales y libros temáticos nacen como propuestas y se desarrollan como contenidos en curso hasta que desembocan ya en productos escritos.
Y también en el mundo institucional se actúa a partir de contenidos escritos. Las reflexiones y valoraciones sobre temas diversos y casi todos los discursos, intervenciones, declaraciones, ponencias o programas parten con frecuencia de un estudio, guión, planteamiento, pauta o esbozo escrito, y en ocasiones se decantan en documentos finales que pueden tener especial relevancia.
A su vez, la regulación en el mundo de la empresa se sustenta en códigos, reglamentos, normativas, instrucciones, protocolos, políticas, contratos, estatutos, condicionados, procedimientos… que han de mostrar siempre claridad y quedar registrados por escrito con precisión, sin vaguedades ni ambigüedades. Y lo mismo ocurre con las acciones de venta, promoción, negociación, mediación, licitación…, que suelen redundar con mayor facilidad en resultados positivos si parten de estudios, criterios, guías y planteamientos premeditados, reflejados por escrito para su mejor aprovechamiento.
También la gestión y la dirección de personas precisan contenidos: la identificación del talento requiere contar con signos y evidencias de desempeño, criterios de diagnóstico, clasificaciones y perfiles profesionales, mapas de conocimientos, descripciones competenciales y definiciones sobre entornos y requerimientos. La formación se apoya siempre en el texto, ya se trate de materiales impresos, documentos digitales o pantallas preparadas para la navegación on line interactiva, o consista en guiones, diapositivas y materiales de acciones presenciales. Y la selección y la promoción de profesionales se llevan asimismo a efecto mediante pruebas objetivas, planteamientos de actividades, observaciones y otras soluciones similares, así como contando con criterios de evaluación e ideas que faciliten el feedback, materiales y actos, todos ellos, que, en uno u otro soporte, son siempre en buena medida contenidos textuales o de fundamentan en estos.
Finalmente, el mundo de la comunicación, además de recurrir a la grabación de imágenes y a las actuaciones en directo, también se alimenta de contenidos escritos: artículos, crónicas, noticias, reportajes, entrevistas… combinan texto con ilustraciones y fotografías con los que llenar medios y espacios, mientras que propuestas, guiones, escaletas, material documental, preguntas y respuestas o proyectos piloto ayudan a los profesionales a diseñar y conducir sus ensayos y programas.
Iniciativas y proyectos como los citados (al igual que otros muchos) precisan de contenidos escritos preparados para provocar ciertos impactos en las personas y producir los beneficios, más o menos tangibles, esperados. Elaborarlos, mejorarlos o transformarlos constituye una tarea compleja, que requiere tiempo y un esfuerzo propio o de profesionales de la organización.
Los contenidos deben ser útiles
Ya se trate de un material que refleje avances en un proyecto, de una construcción que cumplirá por sí misma una funciòn (de apoyo o directa) o de una elaboración destinada a convertirse o transformarse en un producto que será publicado o explotado, los contenidos deben responder siempre a la utilidad buscada.
Pensado en su fines, los contenidos pueden ser de diferentes tipos:
Son, por tanto, los contenidos previos de una actividad que va a continuar.
Estos contenidos permiten ver los avances del proceso puesto en marcha para crear o chequear un contenido o para transmitir y valorar conocimientos y habilidades.
También pueden destinarse a facilitar acciones personales de comunicación (seminarios, conferencias, discursos, declaraciones…) cuando esos materiales (guiones, pautas, material de consulta…) no serán entregados ni exhibidos, pero se utilizarán para fabricar otros que sí lo serán.
Suelen asociarse a labores de análisis de otros contenidos ya existentes (se trata de informes de calidad o de potencial, listados de errores, propuestas de mejora, planteamientos alternativos, informes de riesgo, versiones validadas y corregidas, conclusiones tras ciertas labores de guía y asesoramiento…).
Son una pauta para desarrollar una actuación que debe ejecutarse personalmente, pero sin que el material vaya a ser un producto exhibido o entregado ni se vaya a transformar en otro producto.
También pueden servir para desarrollar acciones presenciales cuando van a ser directamente utilizados (diapositivas de presentaciones, pósters informativos, material entregable…).
En este caso, el propio contenido es el producto final, tal como se presenta o pendiente de que se le dé el formato final y se integre en el soporte previsto.
Elevar el potencial de un contenido pasa por asegurar su calidad
No hay contenido de calidad si no está pensado para resultar útil, si no responde a la necesidad real de quien insta su eleboración y no encaja en los requerimientos que permitirán su aprovechamiento y explotación. Pero la utilidad no siempre garantiza que los contenidos desplieguen todos sus efectos posibles. Para tener éxito es recomendable dotar a los contenidos de ese atributo cuya definición se muestra siempre tan controvertida: la CALIDAD.
Hay cualidades que, aunque en cierta medida suelen ser necesarias cuando se busca la funcionalidad de los contenidos, solo si se integran en estos de un modo inequívoco permitirán exprimir el potencial de estos, mejorar su aceptación e incrementar su impacto.
La evidencia de que un contenido atesora una calidad incontestable se revela cuando su utilidad viene acompañada por una dosificación adecuada de características como el rigor, la claridad, la amenidad, la corrección, el estilo, la distinción y el respeto por la inteligencia del destinatario.
Contenidos distintos en formatos diversos
En cuanto a los FORMATOS de presentación, varían en función tanto de los contenidos como de los contenedores. Pueden utilizarse formatos meramente funcionales (cuando se trata de contenidos iniciales o intermedios) o aplicarse requerimientos específicos. cuando se destinararán a ciertos usos en las empresas (contenidos finales de uso interno, de base o apoyo o de utilidad directa) o si deben aplicarse normas de estilo corporativas o hay que atender a otros condicionantes (según proyectos, usuarios, destinatarios…).
Los contenidos también pueden presentarse de modo que resulten útiles para su transformación en otros productos (documentaciones, guiones, tratamientos, pautas…) o puede darse a los materiales una forma concreta cuando deba ser definitiva (maquetaciones finales, versiones en diferentes formatos digitales, ajuste a plantillas predeterminadas…).
Asimismo, cuando sea preciso, pueden introducirse directamente textos y gráficos en los espacios que deban alojarlos (medios y canales que distribuyen a su modo los contenidos en las secciones creadas dentro de su layout).
Para conseguir contenidos de calidad es preciso combinar las tareas de elaboración con una documentación sólida, un análisis minucioso y la aplicación de estrictos controles y revisiones a los materiales en curso.
Sobre los formatos de entrega de los contenidos, se incluye más información en la pestaña MATERIALES, dentro de la sección CONTRATACIÓN
Gama de contenidos y servicios vinculados
La gama de CONTENIDOS a tu disposición se clasifica aquí de manera práctica en cinco secciones:
(Puedes examinar los principales tipos de contenidos y servicios vinculados pulsando sobre los enlaces incluidos en las siguientes cinco secciones. También puedes acceder a estas desde la página principal, pulsando sobre las imágenes del SLIDER frontal o desde los menús ubicados en la barra lateral derecha de las páginas informativas).
Dentro de este segmento de contenidos se incluyen los materiales técnicos necesarios en diferentes actividades de los profesionales, empresas e instituciones (para objetivos comerciales, de gestión y organización, regulatorios, de comunicación interna o externa, o publicitarios, entre otros) y los de tipo jurídico y normativo.
También quedan englobados los trabajos documentales o de análisis documental que tienen fines funcionales y no están pensados para su explotación como obras técnicas o temáticas por editoriales o medios de comunicación.
Asimismo, se consideran tareas sobre contenidos técnicos las de creación y optimización de materiales para la web cuando se destinan a espacios corporativos o se trata de mejoras destinadas a potenciar la indexación por los buscadores (sin componentes estrictamente creativos).
Este segmento engloba todos los contenidos que están pensados para diferentes fines y objetivos planteados en las áreas de recursos humanos de las empresas o que pueden interesar a personas que desean mejorar su cualificación profesional.
Los contenidos que se elaboran, revisan y actualizan pueden corresponder a tareas de diagnóstico de plantillas y colaboradores, análisis funcionales de áreas y departamentos, planes y programas formativos (cursos, módulos, cápsulas, casos, actividades…) pruebas de evaluación y acciones de selección y promoción.
En los contenidos formativos se siguen estrategias y metodologías muy diversas, con sustento en diferentes soportes.
► DIAGNÓSTICO, FORMACIÓN Y SELECCIÓN
En este segmento quedan incluidas las tareas de elaboración o remodelación de contenidos para obras impresas, audiovisuales o escénicas que van a ser objeto de publicación, explotación o exhibición comercial. se dirigen, por tanto, a editoriales, autores que proyectan una autoedición, productoras de cine, medios de comunicación televisivos o radiofónicos, medios y canales digitales, promotoras de obras teatrales, promotoras de espacios o eventos de entretenimiento…).
Puede tratarse tanto de obras de ficción (novelas, relatos, guiones…) como de trabajos de estudio técnico o de divulgación temática.
► CONTENIDOS CREATIVOS Y DIVULGATIVOS
En este segmento se incluyen los escritos que tienen fines comunicativos, han de tener un marchamo de autoría personal (sea individual o colectiva) y requieren de especial cuidado tanto en el fondo como en la forma, cuando se requiere su diseño y elaboración o su remodelación. Pueden estar destinados a su publicación a través de medios muy diferentes —prensa escrita, revistas, medios y canales digitales, televisión, radio, promotoras y productoras de espacios informativos o de eventos de entretenimiento…— y los formatos pueden ser muy diversos: artículos, crónicas, reportajes, notas, reseñas, críticas…
También se incluyen los contenidos destinados a espacios web (blogs, medios sociales o canales similares) cuando se trata de iniciativas en las que prima el componente creativo o de comunicación personal y constará una firma, sea del autor o del medio promotor.
A su vez, se encuadran aquí los escritos destinados a la comunicación oral personal (discursos, conferencias, declaraciones…) y otros que suelen incluir mensajes en representación de instituciones, asociaciones, organizaciones o colectivos (manifiestos, comunicados…).
► COMUNICACIÓN PERSONAL Y PROFESIONAL
Se trata de un segmento de servicios que, aunque estén casi siempre vinculados a la elaboración de contenidos textuales, no tienen como fin principal su elaboración o revisión.
Por un lado, se incluye el apoyo en ciertas acciones de consultoría que presentan características especiales y tienen un componente primordial de indagación, estudio y análisis que finalmente debe hallar un reflejo documental.
Hay otros servicios que se basan de manera preponderante en la interrelación personal, como algunos tipos de orientación técnica para profesionales o de asesoramiento para personas con proyectos creativos.
Asimismo, este segmento contiene supuestos de apoyo personal técnico en determinadas situaciones (visitas, reuniones, eventos…), tareas de coordinación de personas en ciertos proyectos, planes, programas e iniciativas de formación y desarrollo y la posibilidad de instalación, personalización, administración y edición de websites.
► CONSULTORÍA, ASESORAMIENTO Y GESTIÓN
En cada tipo de contenido encontrarás un detalle descriptivo sintético.
OBJETIVO — Explicación sintética de en qué consiste ese contenido o servicio vinculado.
NECESIDAD — Descripción sintética de la necesidad que puede hacer recomendable contar con ese contenido.
PARA QUIÉN — Personas, profesionales, empresas y/o entidades a las que se dirige el contenido. Se separan en líneas distintas los destinatarios directos de aquellos que necesitan materiales para sus clientes.
CONTENIDOS — Enumeración de los principales tipos de materiales cuya creación o revisión se encarga o es preciso elaborar para cumplir los objetivos previstos. Pueden ser iniciales, intermedios, instrumentales o finales.
ACTIVIDADES — Actividades (tareas) que pueden combinarse para conseguir el objetivo (según el objetivo, puede bastar con una o combinarse dos o más de las que se citan).
LÍNEAS — Modalidades con las que puede asociarse el encargo en cuanto a confidencialidad, titularidad de los materiales, visibilidad y constancia de autoría y posibilidades de uso del material (puede variar la línea según el objetivo y las condiciones de cada encargo, y combinarse más de una en un mismo proyecto, pero únicamente habrá una línea por cada unidad de material entregado).
CRITERIOS DE CALIDAD — Aspectos que deben tenerse en cuenta para asegurar un resultado óptimo (que garantice la utilidad y eficacia de los contenidos). Se enumeran los pertinentes, aunque la relevancia de cada uno dependerá de cada tipo de contenido, de los parámetros del encargo y del objetivo buscado.
OBSERVACIONES — Otros aspectos de interés sobre el tipo de contenido o servicio vinculado (alcance, marco de las actividades, límites, fases específicas del proyecto, controles de calidad recomendados, contenidos adecuados cuando se dan ciertos objetivos o circunstancias, referencia a otros contenidos, puntualizaciones…).
Las descripciones de cada tipo de contenido o servicio vinculado tienen solo carácter informativo (no se trata de packs contratables), por lo que su concreción dependerá de las condiciones que se acuerden en cada encargo. En todo caso, no se trata de soluciones integrales, por lo que algunas pueden tener un alcance mayor que otras en función de las actividades que puedan combinarse.
Así, en determinados supuestos se podrán articular y compaginar tareas diversas según las exigencias del proyecto –diseño, elaboración, análisis, revisión, transformación, asesoramiento, gestión…–, mientras que en otros casos los encargos aceptados se moverán dentro de un margen más acotado (por ejemplo, limitando las tareas solo al diseño de propuestas iniciales, o al suministro de ideas y planteamientos, o al análisis y revisión de materiales existentes, o a la elaboración de contenidos a partir de documentación previamente suministrada…). Ello viene dado por la definición del tipo de contenido y en ocasiones se concreta en el apartado OBSERVACIONES.
Sobre la disponibilidad de los servicios, ten en cuenta lo que se indica en el punto 5 del documento TÉRMINOS Y CONDICIONES.